Hablar de detección de mentiras nos lleva de inmediato a pensar en contextos legales en donde la labor del psicólogo ha ido tomando mayor presencia e importancia durante los últimos años. En este ámbito, los psicólogos forenses, de la mano de otros especialistas judiciales, intervienen a través de técnicas que ayudan a discriminar entre testimonios reales y falsos, analizando diversos indicadores que nos permiten llegar a una conclusión.
El análisis de estos indicadores puede ser utilizado no solo en la rama de la psicología forense, sino que se adapta para ser aplicado inclusive en el ámbito organizacional. El reclutamiento y selección de personal es uno de los procesos clave en una organización, ya que se busca incorporar a ese “talento” que haga sinergia con la cultura y valores de la empresa, pero que también posea actitudes y aptitudes que favorezcan al área a la que postula.
Recordemos que todos en algún momento hemos sido candidatos en algún proceso de selección y nos preparamos cuidadosamente para responder con fluidez y firmeza, incluso aquellas preguntas que sugieren una clásica respuesta “cliché”. Sin embargo, en la detección de mentiras aplicada en las entrevistas de selección, el enfoque va mucho más allá de una respuesta compleja y adornada, que, por lo general, asumimos busca escuchar nuestro evaluador.
Un evaluador experto prestará especial atención a las microexpresiones que acompañan el relato junto a diversas posturas corporales, lo que ya conocemos como lenguaje no verbal. En ese sentido, es importante mencionar a Paul Ekman, quien identifica siete emociones principales: tristeza, ira, miedo, sorpresa, asco, desprecio y alegría. Estas se pondrán de manifiesto automáticamente frente a los estímulos que pueda emitir el evaluador, ya que de manera consciente no pueden ser controladas y revelan el verdadero sentir del candidato.
Un buen proceso de selección no debe limitarse a asumir o interpretar de manera aislada lo previamente mencionado; como profesionales en el área, debemos conducir la entrevista y clarificar el relato cuando consideremos que se presentan incongruencias, evitando así generar algún tipo de sesgo en el proceso.
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