En la actualidad, cada vez son más jóvenes las personas que cometen infracciones en la sociedad, no solo en el Perú, sino en toda Latinoamérica. Jóvenes y menores son responsables del incremento del porcentaje de crímenes violentos en México, Colombia y Brasil. Se informó recientemente que los jóvenes son ahora la población con mayores probabilidades de ser tanto víctimas como perpetradores de la violencia. Por ejemplo, el 6 de junio del presente año, se pudo observar que una persona corre tras ser perseguida por un sujeto que portaba un cuchillo; la víctima fue agredida por su victimario y murió.
Según los padres del menor, este presenta esquizofrenia y había llevado su tratamiento. Entonces, como joven peruana y estudiante universitaria, me he preguntado lo siguiente: ¿Por qué nuestros jóvenes están cometiendo este tipo de delitos? ¿Acaso los jóvenes son capaces de ser sicarios o asaltantes? ¿Estamos hablando de la influencia que tiene su alrededor en ellos? Pues sí existen factores que pueden conllevar a un joven a cometer este tipo de infracciones como desintegración familiar y falta de apoyo. La ausencia de una estructura familiar estable y el déficit de apoyo emocional pueden dejar a los jóvenes vulnerables a la influencia negativa.
Violencia y pandillas. La presencia de pandillas y la exposición a la violencia en los barrios marginales puede influir en la participación de los jóvenes en actividades delictivas. Por ejemplo, El caso de Jefri Herrera Sánchez, que fue cabecilla de una de las tres pandillas más grandes del Callao, iniciando su actividad criminalista desde los 12 años.
Desigualdad social y pobreza. La desigualdad económica y social son factores que pueden llevar a la marginalización de los jóvenes. Entonces me pregunto: ¿El Perú está preparado para medidas disuasorias para la prevención y reintegración de un joven delincuente? Pues existían programas especializados para esto. Digo “existían” porque actualmente no hay programas que trabajen de la mano con jóvenes infractores, pues hemos dejado de darle importancia a este tema que afecta al presente y al futuro del país.
Existían programas de éxito en el Perú, dirigido por jóvenes líderes del Ministerio Público que se aproximaban a los chicos que están en pandillas, a las familias de estos y los invitaban a participar del programa. Ahí es donde se potencian las capacidades morales de este líder negativo y se vuelve algo positivo. Poder Judicial, Justicia en tu Comunidad, SíseVe del Ministerio de Educación, son programas de prevención de política criminal. Debemos hacer algo, volver a invertir en nuestros jóvenes y volver a darle la importancia que se merecen al resolver algunos problemas que estos tienen, porque son estos el presente y futuro de nuestro país.
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