- El Dr. Miguel Tresierra, médico especialista en Epidemiología, explica en qué consiste esta enfermedad y cómo debemos actuar ante ella.
Tras la emisión de la alerta epidemiológica por el aumento de casos del síndrome de Guillain Barré (SGB) en varias regiones del Perú hace unos días, es preciso saber que esta enfermedad no es contagiosa y que puede ocurrir a cualquier edad, siendo más frecuente en adultos que en niños (y muy raro en menores de 2 años).
A continuación, el Dr. Miguel Ángel Tresierra Ayala, médico especialista en Epidemiología y docente de la Escuela Profesional de Medicina de la Universidad César Vallejo (UCV), explica en qué consiste esta enfermedad y las acciones inmediatas que debemos tomar en cuenta en caso de contraerla.
“El SGB se caracteriza por debilidad muscular o parálisis flácida motora simétrica (o sea, en ambos lados del cuerpo), que empieza en forma súbita y progresa rápidamente muchas veces en forma ascendente; todo ello con pérdida de reflejos. Todo paciente con sospecha de SGB debe ser hospitalizado para estudio y vigilar su progresión, porque al seguir ascendiendo puede afectar los músculos respiratorios y necesitar ventilación mecánica”, detalla el especialista.
Cabe mencionar que se desconoce la causa exacta del síndrome de Guillain Barré. Sin embargo, dos tercios de los pacientes aseguran haber tenido síntomas de infección en las seis semanas anteriores e infecciones generalmente virales: influenza.
“El paciente con parálisis debe ser conducido inmediatamente a un centro hospitalario para ser controlado, pues la severidad del cuadro clínico es un factor pronóstico desfavorable”, indicó el catedrático de la Escuela de Medicina de la UCV.
Acciones inmediatas
El Dr. Tresierra Ayala señala que el tratamiento específico se basa en la administración de gammaglobulina por vía intravenosa con una dosis total de 2 g/kg. Pero en la hospitalización el tratamiento general consiste en:
- Preservación de la capacidad ventilatoria, así como de la vía aérea.
- Monitorización cardiovascular.
- Tratamiento de trastornos autonómicos (arritmias, hipertensión/hipotensión arterial).
- Prevención y/o tratamiento precoz de las infecciones.
- Nutrición e hidratación adecuadas.
- Prevención de escaras cutáneas.