Un ingeniero industrial, un empresario

El Perú mejoró 20 posiciones en la lista Desempeño Económico del Ranking de Competitividad Mundial 2022. Al parecer estos resultados no significan un impacto alentador, pero sí un direccionamiento hacia un mejor desempeño económico. No es suficiente con crecer económicamente, resulta que es indispensable ser competitivos y para serlo un país debe considerar la capacidad de ser próspero al usar completamente los recursos que dispone y sus competencias. En Europa la formación en Ingeniería Industrial permite al aprendiz desarrollar y aplicar sus conocimientos a base de fundamentos científicos en el sector empresarial e industrial en áreas de electricidad, electrónica, química, textil, organización industrial o robótica, sin descuidar la formación en el sector metalúrgico. USA cuenta con los mejores índices de alta calidad en educación superior. Las experiencias curriculares están enfocadas a los procesos industriales, la ingeniería de operaciones, los procesos de optimización en manufactura; en consecuencia, la ingeniería industrial es conocida como ingeniería de procesos o sistemas o de manufactura. Asimismo, la ingeniería industrial tiene súper exigencias en el ámbito de la investigación, por ello en la mayoría de universidades los cursos de pregrado y posgrado están direccionados y enfocados hacia el desarrollo de la investigación de cada área de la Ingeniería Industrial en general. En Japón la Ingeniería Industrial se renombra como Ingeniería de Sistemas e Industrial, y el contenido tiene la misma fase de estudios al igual que en USA. Además, la Ingeniería Industrial en Oriente es una combinación con enfoques dirigidos al uso de las TIC, dado que el país en mención es potencia y líder en infraestructura y tecnología, por eso sus procesos industriales se encuentran muy automatizados, por lo que requieren un egresado en ingeniería industrial con sólidos conocimientos en áreas tecnológicas. En el Foro Económico Mundial se generó la atención al hablar sobre la Cuarta Revolución Industrial, donde se aprecia periodos de cambios debido a los rápidos avances tecnológicos. Las políticas y las legislaciones de la actualidad no son capaces de mantener el ritmo de la innovación y desarrollo. En 2017, con la finalidad de garantizar que las tecnologías nuevas y emergentes ayuden a la humanidad en el futuro en vez de perjudicarla, el Foro creó la Red de centros para la Cuarta Revolución Industrial, con sede en San Francisco. Esta red abrió centros en China, India y Japón en 2018 y está creando rápidamente filiales administradas en muchos países de todo el mundo. Esta red global trabaja con participación del empresariado y del sector académico, para diseñar conjuntamente y poner a prueba estructuras ágiles que permitan regular las tecnologías nuevas y emergentes, como:

• La Inteligencia Artificial (IA)
• R+D+I
• Los vehículos autónomos
• Blockchain
• Política de Datos
• Drones
• Internet de las cosas (IdC)
• innovaciones ambientales
• Metodologías Ágiles
• Design Thinking
• E-comerce
• Machine learning

Más de 2,1 millones de Mypes formales operan en el mercado peruano al 2021.Este segmento empresarial representa el 99.5% del total de empresas formales; en la economía peruana el 95.6% son microempresas, el 3.8 % pequeña y el 0.1% mediana. Ante esta realidad, la formación profesional y el conocimiento de las nuevas tecnologías representa un reto para el Ingeniero Industrial, quien es el responsable en determinar las estrategias respectivas con conocimientos sólidos y formación académica adecuada para hacer frente a esta competitividad en los próximos años. CREAR UN ENFOQUE INDUSTRIAL DE LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS Cuando se trata de AL (América Latina) se puede notar un direccionamiento por parte de los gobiernos de generar mayores y mejores avances tecnológicos dentro de las administraciones públicas del Estado, lo que formula políticas para desarrollar la Industria 4.0. Sin olvidar que el propósito inicial de los precursores de la Industria 4.0, como Alemania o USA, fue invertir en nuevas tecnologías para mejorar la productividad en determinados sectores económicos. Eso impulsó el desarrollo y bienestar de estas sociedades. La aplicación de herramientas tecnológicas en el sector público, aunque también se pusieron en marcha, no fue su objetivo primordial. En América Latina, el enfoque industrial de las nuevas tecnologías está poco desarrollado. CONCLUSIONES: 1.- Las nuevas tecnologías tienen el potencial de cambiar las industrias, hacer crecer las economías, mejorar las vidas, ayudar a restaurar y proteger el planeta. 2.- Los nuevos líderes deben estar preparados para aprovechar sus oportunidades y mitigar sus riesgos. Se necesita mayor esfuerzo de inversión y análisis que conjugue la necesidad de desarrollo económico más allá del sector primario y las nuevas tecnologías de la Industria 4.0 para avanzar hacia una recuperación sostenible y una verdadera economía del conocimiento, sin dejar a nadie atrás. 3.- Se pretende que el egresado de ingeniería industrial participe en Investigación, Desarrollo e Innovación, con el propósito de MOTIVAR EL ESPÍRITU EMPRENDEDOR y crear empresa desarrollando su talento para generar empleo y desarrollo del país.