La inteligencia artificial (IA) está cambiando la forma en que se hace actualmente el marketing. Esto podemos notarlo con los adelantos tecnológicos que se le brinda al consumidor y usuario, y de cómo las empresas llegan a los clientes a través de todos los recursos disponibles del universo tecnológico para alcanzar conquistarlos.
En el enfoque tradicional, el marketing se basaba en la segmentación de audiencias y en la creación de mensajes publicitarios para cada segmento. De esta manera, se llegaba a los clientes meta o al público objetivo. Frente al contexto tecnológico, esto va a quedar muy en el pasado.
En el enfoque actual, la inteligencia artificial se utiliza para analizar grandes cantidades de datos y crear mensajes personalizados para cada individuo, llegando a mucho público y mercados globales donde se necesitan grandes volúmenes de información que sirven para direccionar y gestionar ventas que permiten satisfacer necesidades o crear necesidades futuras que generen mayores ingresos a las empresas
La inteligencia artificial se utiliza en el marketing de diversas maneras. Por ejemplo, se utiliza para predecir el comportamiento del usuario en un caso real. Al tener en coyuntura el cambio climático, sabemos que se van a producir impactos en zonas de la costa norte del Perú. Así, a través de la inteligencia artificial podemos generar campañas de prevención en redes sociales donde se logren adquirir accesorios que permitan protegernos como trajes impermeables, botas, guantes, cascos, etc. Las empresas pueden generar la necesidad de estos artículos y poder potenciar sus ventas, automatizar tareas, ser más eficientes, obtener mejores resultados y trabajar en la innovación y la mejora continua de las campañas. Algunas de las herramientas pueden ser: comunicación automatizada con chatbots; marketing basado en datos; curación de contenidos; recomendaciones personalizadas de productos y servicios; campañas publicitarias más eficientes; búsquedas inteligentes y personalizadas, entre otras.
También se utiliza la IA para identificar audiencias específicas teniendo para ello un gran ahorro de tiempo, mejores resultados y determinar si son adecuados o valiosos para alcanzar los objetivos de la empresa. Además, la inteligencia artificial se utiliza para la compra y venta de publicidad regular en tiempo real. Esta interacción permite tener un resultado inmediato, ágil y dinámico que brinde valor en la gestión que se realiza. La inteligencia artificial analiza, además, grandes cantidades de datos para determinar qué anuncios son más efectivos y para mostrarnos su impacto a las personas adecuadas en el momento adecuado.
En resumen, la inteligencia artificial está transformando el marketing en la era digital ya desde unos años atrás y está tomando fuerza para los próximos años donde el adelanto tecnológico hace el trabajo simple y rápido, dejando en el olvido las técnicas tradicionales que demoran para su ejecución. Las empresas que adoptan la inteligencia artificial en sus estrategias de marketing pueden obtener mejores resultados y ser más eficientes en sus campañas. La inteligencia artificial es así una herramienta poderosa que puede ayudar a las empresas a llegar a su público objetivo de manera más efectiva y crear mensajes publicitarios personalizados para cada individuo y en el menor tiempo posible.
En ocasiones podemos preguntarnos si esta inteligencia artificial reemplazará al hombre. ¿Será posible que llegue ese día? Es ahí donde tendremos que meditar sobre hasta qué punto podríamos llegar con este tipo de herramientas tecnológicas.
De esta manera, la Universidad César Vallejo, en especial la Escuela de Marketing y Dirección de Empresas, ofrece esta información en donde se hace énfasis en el panorama de la transformación que está teniendo la carrera y de cómo la inteligencia artificial es un complemento para la profesión haciendo que los estudiantes tomen decisiones de forma gerencial con simuladores especializados en los laboratorios.
Todo esto bajo el soporte del equipo de docentes especializados, quienes impulsan a los jóvenes a apostar por las nuevas tendencias y oportunidades que exigen el mercado y los consumidores una vez los estudiantes salgan de las aulas.
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